El gobierno de México, mediante la Secretaría de Relaciones Exteriores, reconoce que los grupos del crimen organizado tienen poderío económico, técnico, logístico y una capacidad de fuego sin precedente, por lo que en su combate es clave la cooperación con Estados Unidos.
En el cuarto informe de labores de la SRE, en el capítulo sobre Las relaciones de México con América del Norte, al abordar los temas de la agenda bilateral destaca en el rubro de seguridad que se acepta que “las amenazas planteadas por la delincuencia organizada transnacional al bienestar de los mexicanos son evidentes”.
Como parte del diagnóstico, el documento señala: “A la creciente sofisticación y poderío financiero, tecnológico y logístico de los grupos delictivos se suma hoy una capacidad de fuego sin precedente, derivada del pernicioso tráfico de armas, que constituye un serio riesgo a las autoridades encargadas de la seguridad pública”.
Para la dependencia, los avances alcanzados con la Iniciativa Mérida, el programa de financiamiento del gobierno de Estados Unidos para el combate al narcotráfico y el crimen organizado, expresan “la voluntad política de reforzar dicha cooperación”.
Aunque el informe de labores reconoce que en cuanto al ejercicio de los recursos acordados para la Iniciativa, “hasta el mes de agosto de 2010 se habían erogado 83% de los fondos del año fiscal 2008 y 15% de los fondos del año fiscal 2009. El presupuesto del 2010 será ejercido una vez que el Congreso de EU haya aprobado el plan de gastos correspondiente”.
Hasta el momento, el Congreso de Estados Unidos ha aprobado mil 506 millones de dólares para los tres primeros años de la Iniciativa Mérida, cerca de 100 millones más de lo previsto originalmente (400 millones en 2008; 720 millones para 2009 y 386 millones más para este año).
Se detalló que entre septiembre de 2009 y agosto de 2010 se recibieron recursos materiales por cerca de 300 millones de dólares, entre los que destacan cinco helicópteros Bell-412 para la Secretaría de la Defensa; 15 camionetas con equipo de inspección no intrusiva para la SSP; cuatro laboratorios de balística IBIS y 13 camionetas blindadas para la PGR; equipo para procesamiento migratorio para el Instituto Nacional de Migración; 318 equipos para el sistema de control de confianza para diversas dependencias, y 43 escáneres de inspección no intrusiva para la Sedena, además de capacitación para enfrentar a la delincuencia.