El año pasado, la invasión rusa de Ucrania dominó el discurso en Davos. Esta vez, son las consecuencias de la guerra las que ocupan un lugar central, con una crisis energética que hace presagiar una recesión. Los habituales de Davos vuelven este lunes (16.01.2023) a un entorno que ya les es familiar. Eso sí, los prados verdes del año pasado, cuando la cumbre del Foro Económico Mundial se celebró en mayo, están cubiertos de nieve. Si bien el tiempo ha cambiado desde la edición del año pasado, los temas a debate siguen siendo los mismos: se espera que la guerra en Ucrania y sus consecuencias dominen nuevamente la agenda.
La reunión anual del Foro Económico Mundial (FEM, o
WEF, por sus siglas en inglés), a la que asisten líderes políticos y
empresariales mundiales, celebridades y destacados activistas sociales, tiene
lugar en un momento en el que la economía mundial está bajo una presión
extrema. La alta inflación, la crisis energética y las interrupciones de otros
suministros, causadas por la guerra, se suman a un resurgimiento de la pandemia
en China.
"Las crisis económicas, ambientales, sociales y
geopolíticas están convergiendo y fusionándose, creando un futuro
extremadamente volátil e incierto", dijo a los periodistas el fundador del
WEF, Klaus Schwab. "La reunión anual de Davos intentará asegurarse de que
los líderes no queden atrapados en esta mentalidad de crisis".
Participación de Scholz y Von der Leyen
La reunión de cinco días (desde el 16 hsta el 20 de
enero), que se convoca bajo el lema "Cooperación en un mundo
fragmentado", contará con la participación de la presidenta de la Comisión
Europea, Ursula von der Leyen, de más de cincuenta jefes de Estado y de
gobierno, entre ellos, el canciller alemán, Olaf Scholz, (que el año pasado
afirmó en Davos que "no podemos permitir que Putin gane la guerra")
y el español Pedro Sánchez. Un récord de 56 ministros de Finanzas y
un total de 19 gobernadores de bancos centrales.
También se espera a algunos líderes elegidos
recientemente, como el presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, el
mandatario colombiano, Gustavo Petro, y el presidente de Filipinas, Ferdinand
Marcos Jr. El contingente africano estará encabezado por el presidente de
Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, y su homólogo de Tanzania, Samia Suluhu Hassan.
Estados Unidos estará representado por el enviado climático del presidente Joe
Biden, John Kerry, y la representante de Comercio, Katherine Tai.
No habrá participación de Rusia, ya que los políticos y
líderes empresariales del país siguen siendo excluidos de la reunión. El WEF
congeló sus lazos con entidades rusas el año pasado, después de que Moscú
invadiera Ucrania. Este país, por el contrario, volverá a enviar una delegación
de alto nivel. Sin embargo, los organizadores se negaron a compartir más
detalles por razones de seguridad.
El reto de evitar una recesión
La 53ª edición de la reunión de Davos se lleva a cabo en
medio de una de las desaceleraciones económicas más pronunciadas de este siglo
y la directora del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva,
advierte que un tercio de la economía mundial podría sufrir una recesión
este año.
El conflicto en Ucrania y las sanciones occidentales
contra Rusia han provocado una crisis energética sin precedentes. Si bien la
inflación en las economías avanzadas, como la de Estados Unidos o la de la
eurozona, parece haber tocado techo, se mantiene en un nivel superior al
promedio, lo que obliga a los bancos centrales a mantener un rumbo de aumentos
agresivos de los tipos de interés. Eso representa mayores costos de
endeudamiento, y puede agravar la crisis de deuda en países en desarrollo, así
como la pobreza.
La encuesta anual de riesgos publicada por el WEF el
miércoles (11.01.2023) situó a la inflación causada por la pandemia y la
invasión rusa de Ucrania como el principal riesgo inmediato. Y vaticinó que es
probable que las crisis en el suministro de energía y alimentos persistan
durante los próximos dos años.
La reunión en Davos "tendrá lugar en el contexto
geopolítico y geoeconómico más complejo en décadas", dijo el presidente
del WEF, Borge Brende. "Realmente hay mucho en juego para la economía
global, ya que debemos tratar de impedir una recesión global, evitar el
estancamiento, la inflación y el endeudamiento excesivo".
La reunión de Davos regresa a su horario tradicional de
invierno tras dos años de pandemia. El encuentro se canceló en 2021 debido al
COVID-19, adoptando un formato digital, y el año pasado se trasladó a mayo, lo
que provocó importantes ausencias por problemas de agenda.
Sin embargo, este año Davos albergará la mayor
participación empresarial de su historia, con 1.500 líderes empresariales
asistentes, entre ellos, 600 directores ejecutivos de algunas de las empresas
más grandes del mundo.
https://www.dw.com/es/el-foro-econ%C3%B3mico-mundial-se-re%C3%BAne-entre-temores-de-recesi%C3%B3n/a-64399980