La urbe portuaria en el Donbás se convirtió en símbolo de los crímenes de guerra que Rusia ha cometido en Ucrania. Pero la historia de la ciudad no termina con la ocupación rusa, opina Roman Goncharenko.
El capítulo más oscuro de la historia de Mariúpol llegó a
su fin en estos días. Los combatientes ucranianos dejaron la acería Azovstal
luego de tres meses de resistencia. Fue un récord en esta etapa de la guerra de
Rusia contra Ucrania, que comenzó con la anexión de Crimea. Más larga fue la
defensa del aeropuerto de Donetsk, que se extendió entre 2014 y 2015. Pero la
situación en Mariúpol fue más compleja, porque Ucrania no pudo ayudar
militarmente a los sitiados.
Muchos soldados ucranianos dejaron los túneles del
recinto por sus propios medios, otro lo hicieron cargados en camillas y otros
tantos se quedaron, para ser los últimos en retirarse, o morir. La esperanza de
quienes eligieron quedar en cautiverio en manos rusas es ser intercambiados por
soldados invasores caídos en manos de las unidades ucranianas. Aparentemente,
Rusia no tiene prisa alguna en hacer algo así y, en cambio, utiliza a los
prisioneros de guerra para hacer propaganda degradante.
Mariúpol. Hoy todo el mundo conoce el nombre de esta
ciudad ubicada a orillas del Mar de Azov. Aparecerá, sin duda, de forma
destacada en los libros de historia de esta guerra de Rusia contra Ucrania, que
es una guerra brutal de exterminio. Mariúpol es la primera gran ciudad
ucraniana que fue sistemáticamente destruida por los rusos, que no tuvieron
consideración alguna con los civiles. La urbe fue rápidamente rodeada, pero no
se rindió, sino que resistió y se convirtió en un modelo a seguir de la
voluntad ucraniana a luchar contra los invasores. Mariúpol fue la única gran
ciudad del sur del país que presentó una resistencia tan enconada, y en Kiev
deberían tener eso en mente.
Aún no se sabe el número exacto de muertos en la ciudad,
que era el hogar de cerca de medio millón de personas antes de la guerra, pero
se teme que podrían ser decenas de miles. Tras semanas de bombardeos
ininterrumpidos, prácticamente no queda ningún edificio residencial sin daños.
Esto es sin duda alguna un crimen de guerra.
¿Por qué Rusia atacó tan brutalmente Mariúpol?
Desde el primer día de la guerra, Mariúpol fue una de las
ciudades donde más fuertemente se combatió, junto con Járkov y Kiev. ¿Por qué?
Principalmente por su importancia estratégica. Mariúpol es, tras Donetsk, el
segundo mayor centro industrial del país y uno de los principales puertos
comerciales. En la primavera de 2014 sufrió el destino de Donetsk y Lugansk y
durante alguna semanas fue controlada por los presuntos separatistas prorrusos,
pero el Ejército ucraniano logró recuperarla con relativa rapidez. La línea del
frente estuvo desde entonces a unos pocos kilómetros de la ciudad. Los dos
gigantes industriales locales, Azovstal y Mariupol Ilyich Metallurgical Combine
pudieron seguir produciendo.
Durante ocho años los habitantes de Mariúpol vivieron en un
polvorín. Pero con la excepción del ataque de enero de 2015, donde murieron más
de 30 personas, la ciudad se salvó y no sufrió más ataques ni destrucción. En
ese lapso, la ciudad se convirtió en un epicentro de una región de habla rusa,
pero con mentalidad ucraniana. La bandera azul y amarilla era una espina
clavada para quienes querían ver a Mariúpol como parte de las regiones que, en
la práctica, están ocupadas por Rusia desde 2014. Esta es también la razón de
la especial crueldad con la que actuó el Ejército de Rusia. Además, el hecho de
que la urbe esté en medio del puente terrestre que pretende crear Rusia hacia
la Crimea ocupada también juega un rol en ello. Crear tal enlace terrestre es
uno de los objetivos obvios de Rusia en esta guerra.
Otra razón también muy importante es que el cuartel
general del regimiento Azov, fundado por nacionalistas, se encontraba en
Mariúpol. Fueron ellos quienes jugaron un papel central en la liberación de la
ciudad en 2014. La sola existencia de este regimiento, una unidad pequeña pero
bien conocida y bien armada de la Guardia Nacional de Ucrania, ha sido un tema
central de la propaganda rusa durante años. Desde que Rusia hizo de la
"desnazificación" un objetivo de guerra oficial, el Kremlin ha estado
tratando de aniquilar a todos los que llama "nazis".
Juicio a criminales de guerra rusos
El precio que tuvo que pagar Mariúpol por esto es
escandaloso. En la memoria histórica mundial, la urbe se suma a la lista de
ciudades que han sido destruidas casi por completo en una guerra. La batalla de
Mariúpol permanecerá en los recuerdos por el desconcertante bombardeo a un
hospital de maternidad, del que fueron sacadas madres ensangrentadas, así como
también por el ataque a un teatro en cuyo sótano se habían refugiado cientos de
civiles, que perecieron allí. Estas imágenes no serán olvidadas. Mariúpol
representa la vergüenza de Rusia.
Pero la historia ucraniana de la ciudad no termina con la
ocupación por parte de las tropas rusas. Así como la acería de Azov volverá a
producir, la bandera ucraniana volverá a ondear allí. Pero el capítulo más
oscuro de la historia de la ciudad no se cerrará del todo hasta que los
criminales de guerra responsables de esta brutal conquista sean llevados ante
la Justicia. Ya se están levantando voces pidiendo un tribunal internacional no
en La Haya, sino en Mariúpol. Allí hay testigos más que suficientes para probar
los crímenes de guerra del Ejército ruso en Ucrania.