El presidente de Chile aprovechó su encuentro con Joe Biden para desmarcarse del silencio que reina entre los gobiernos latinoamericanos.Gabriel Boric aprovechó su encuentro en Washington con Joe Biden para desmarcarse del silencio que reina entre los gobiernos de la Patria Grande tras la última arremetida chavista en contra de la oposición. "Que se respeten las elecciones y se permita que todos los candidatos que asà lo deseen compitan y cuenten con todas las garantÃas que establece la misma democracia", exhortó el presidente chileno, denostado desde Caracas en ocasiones precedentes.
"Boboric, el bobo mayor", le denomina Diosdado
Cabello, número dos de la revolución, cada vez que el mandatario airea los
abusos del chavismo. Boric, que lidera el frente progresista dentro de la
Patria Grande, está en minoría frente a populistas y revolucionarios, pero no
por ello ha dejado de clamar en contra de los desmanes de Caracas y Managua.
La referencia indirecta a María Corina Machado, ganadora
del proceso de primarias sobre la que pesa una inhabilitación ilegal e
inconstitucional, supone el primer espaldarazo para la candidata unitaria de la
oposición, más allá de las críticas realizadas hace meses por el presidente
colombiano, Gustavo Petro.
La pelota diplomática está ahora en el tejado de la Casa
Blanca, que mantiene un ultimátum a Maduro, que acaba el 30 de noviembre, para
que dé marcha atrás en el boicot electoral contra Machado y para que libere
también a presos estadounidenses y venezolanos. De momento, sólo seis
prisioneros políticos, de 273, han obtenido la libertad gracias al Acuerdo de
Barbados.
La propia María Corina Machado ha extremado la cautela
para no caer en las trampas dispuestas por el poder bolivariano. "El
Tribunal Supremo puede decir lo que le dé la gana (sobre la anulación de las
primarias), pero es algo irreversible. El país lo asumió y se lo apropió, no
hay nada que puedan hacer para evitarlo. El Acuerdo de Barbados no se ha
violado todavía, el régimen está tensando la liga (cuerda), pero todavía no se
ha roto", constató Machado en entrevista con el medio argentino Infobae.
También prudente se ha manifestado Francisco Palmieri,
jefe de la oficina externa de EEUU para Venezuela. "La primaria es un
hecho, no se puede cambiar el resultado. Tenemos la confianza de que María
Corina será la candidata de la oposición", reseñó el diplomático.
"Resolver el tema de Venezuela vuelve a estar en la
agenda de prioridades de la administración Biden", corroboró para EL MUNDO
María Puerta Riera, profesora de gobierno americano en Florida. "EEUU
tiene tres objetivos: limitar la influencia de Rusia y China sobre Venezuela y
tener un mecanismo de emergencia si la guerra en Israel se extiende, afectando
el mercado petrolero, aunque sabemos que la producción venezolana está muy por
debajo de un nivel óptimo. Lo otro es sin duda aliviar la presión migratoria, no
solamente por razones humanitarias, sino principalmente de política doméstica.
Esto está generando conflicto entre gobiernos demócratas y la Casa
Blanca", precisó la politóloga.
Los emigrantes ilegales venezolanos rompieron en
septiembre un récord histórico, al sobrepasar a los mexicanos en el número de
detenciones al otro lado de la frontera. De momento, son tres los aviones
cargados de deportados que desde EEUU han aterrizado en Caracas. Hasta el
momento suman 362, aunque el plan es continuar con vuelos de forma constante.