"Hemos pedido los informes respectivos al cónsul (boliviano en Acre) las Fuerzas Armadas (bolivianas) y todos los actores correspondientes" dijo Alurralde, citado por el portal de noticias de la radio privada Erbol.

 Informó que ya se tuvo una comunicación con el embajador brasileño en La Paz, Marcel Biato sobre el incidente y anunció que "vamos a tener una reunión con él para evaluar el miércoles, en base a informes oficiales de ambos lados sobre estos sucesos".

Un grupo de militares bolivianos habría ingresado armado el pasado 25 de abril a la ciudad de Capixaba, de unos 8.000 habitantes, en el estado de Acre, fronterizo con el departamento de Pando, en el extremo norte de Bolivia, según denuncias recogidas por medios de prensa locales.

 Los lugareños también denunciaron que "los uniformados (bolivianos) coparon las viviendas, mataron ganado y maltrataron a los pobladores", según la radio Erbol.

 Bolivia y Brasil comparten una frontera común de 3.100 kilómetros, principalmente en la Amazonia y en muchos lugares hay escasa vigilancia estatal.