El presidente de Bolivia, Evo Morales, ha anunciado este domingo la nacionalización del yacimiento de Mallku Khota, ubicado en el departamento de Postosí (suroeste), una de las reservas mundiales más importantes de indio e iridio
"Nacionalizar
es nuestra obligación", ha dicho Morales durante la inauguración de las
obras de construcción de un mercado modelo en la ciudad de Colomi, ubicada en
el departamento Cochabamba (centro), apenas a unos kilómetros del yacimiento
minero.
"Yo
ya lo propuse el año pasado, pero ha habido algunos problemas", ha
explicado. "En Mallku Khota, por ejemplo, los hermanos están enfrentados,
unos quieren nacionalización y otros no", ha añadido, en declaraciones
recogidas por la Agencia Boliviana de Información (ABI).
La
nacionalización supondrá la llegada de la Corporación Minera de Bolivia
(COMIBOL) a Mallku Khota, cuya prospección correspondía hasta ahora a la
empresa canadiense South American Silver (SAS).
A lo
largo de la última semana, grupos de mineros a favor y en contra de la
presencia de SAS en la región se han enfrentado, dando lugar a un conflicto que
ha derivado en el secuestro de siete trabajadores y, según han apuntado algunos
medios de comunicación, dos muertos, entre ellos un policía.
Al
parecer, los detractores de SAS secuestraron a siete trabajadores, de los
cuales cuatro se escaparon el pasado viernes y tres han sido liberados este
domingo gracias a las negociaciones entre el ministro de Trabajo, Daniel
Santalla, y los manifestantes.
"Me informaron de que los tres últimos
rehenes han sido liberados", ha anunciado Morales. "Saludamos la
comprensión de los compañeros que han entendido que es importante liberar y no
tener retenidos a los trabajadores", ha indicado.
Además,
Morales ha felicitado a Santalla por su gestión. "No sabíamos a quién
hacer caso y les dijimos: 'Pónganse de acuerdo. En cuando se pongan de acuerdo,
estamos aquí para recuperar, revertir o para nacionalizar los centros
mineros", ha revelado.
"Expresamos nuestra satisfacción por su
liberación", ha dicho, por su parte, el portavoz de SAS, Gonzalo
Gutiérrez, al tiempo que ha considerado que "ahora lo primero que debemos
hacer es precautelar el estado de salud de los trabajadores".
Los
liberados son los ingenieros Fernando Fernández y Agustín Cárdenas y un policía
cuya identidad no ha trascendido. Los que consiguieron escapar son el ingeniero
Eustaquio Calle Gómez, el técnico Juan Pablo Mallku, el conductor Marco Antonio
Leytón y una fiscal, cuya identidad tampoco se conoce.
Fernández
y Cárdenas fueron acusados por un tribunal indígena de violar las tradiciones y
costumbres de Mallku Khota y de espionaje por utilizar la vestimenta local para
infiltrarse en el grupo de mineros contrarios a SAS.