Una sola chispa puede encender toda una pradera. Durante el pasado reciente el actual régimen salió del poder de manera breve, cuando una gran manifestación se fue hasta el Palacio de Miraflores, siendo emboscada en las inmediaciones de Puente Llaguno.
Cuando los gobiernos pierden la legitimidad, las condiciones económicas se hacen insostenibles y el pueblo toma la calle, los días de cualquier gobierno están en cuenta regresiva. En América Latina siempre hay oficiales que pueden irrumpir de manera súbita. Especialmente al presentarse el caos, un conflicto social o la anarquía. Lo hicieron hasta en la España de la transición con el teniente coronel Tejero al frente.
Vivimos una situación de violencia, que genera cada día más violencia y se hace espiral. Entre las diez causas que hacen inminente la implosión están:
1) La inseguridad creciente que llegó a niveles sin precedentes: aumentando 14% más que el año anterior. Con una tasa anual de 54 homicidios por cada 100 mil habitantes. Venezuela, según las Naciones Unidas, es el país más peligroso de América del Sur.
2) El desabastecimiento sistemático de productos de primera necesidad: desde el papel higiénico, servilletas, toallas sanitarias, medicinas, harinas, leche, azúcar, aceite, repuestos, hasta cementos y cabillas.
3) La crisis del sistema eléctrico: a tal punto que el 22 de abril del 2013 se decretó una vez más el "Estado de Emergencia Eléctrica Nacional", arrastrándose desde el 2009. La mayoría de nuestras regiones sufren de permanentes o intermitentes cortes que dejan a la mayoría a oscuras, causando graves daños.
4) El alto costo de la vida con el moño suelto: la inflación anualizada ésta rondando el 40% en alimentos y bebidas. En diciembre el queso Santa Bárbara se conseguía a Bs. 74 por kilo y ahora a 140. El jamón, el queso paisa y los amarillos están por encima de los cien mil por kilo. Los precios suben de manera interdiaria.
5) Insuficiencia de agua para cubrir necesidades básicas a parte de la población y el desempleo: en las zonas rurales la falta de agua llega a niveles dramáticos. El número de desempleados según cifras oficiales es de 1.086.681.
6) Falta de respuesta del CNE y el TSJ: los poderes públicos están secuestrados por el Ejecutivo Nacional. El CNE se hizo la vista gorda con la auditoria, al no evaluar los cuadernos de votación. El TSJ nunca le ha dado la razón a quien disiente del oficialismo y los recursos de impugnación van por esa vía.
7) Inexistencia de los mínimos mecanismos de consenso: no tenemos Contralor General de la Nación desde hace dos años, hay siete magistrados del TSJ con el periodo vencido, y tenemos tres de los rectores del CNE en la misma situación irregular. Sin poderes públicos independientes no puede haber gobierno.
8) Atropello sistemático a la oposición: el ejemplo, entre otros, son los golpes sangrientos recibidos por los parlamentarios de la "Unidad" y las calumnias que desde los programas de TV como "Los Papeles de Mandinga" se reciben día a día.
9) Corrupción: desde las maletas repletas de dólares incautadas en la Argentina hasta el caso Makled y la lista Clinton, nunca habíamos escuchado hablar en Venezuela del narco-estado como hoy.
10) Reservas, deuda pública, crisis cambiaria y riesgo país: las reservas líquidas no alcanzan más allá de una quincena. La deuda tiene un servicio impagable. No hay un mecanismo que garantice el libre flujo de dólares y el mercado paralelo causa estragos. El riesgo país sitúa a los bonos venezolanos como chatarra.
En Venezuela buena parte de los pronunciamientos adversos, los golpes de mano o los militares, los dieron los más cercanos al poder: José Tadeo Monagas a su hermano José Gregorio, Linares Alcántara a Guzmán Blanco, Juan Vicente Gómez a su compadre Cipriano Castro, Delgado Chalbaud a Rómulo Gallegos. A Maduro si no lo agarra Cabello, lo agarra el sin nariz.
@OscarArnal
