Se reavivan las manifestaciones en egipto, tras el nombramiento de un nuevo gabinete de corte militar. Los cientos de miles de manifestantes que han salido a las calles en El Cairo y el resto de ciudades, desafiando el toque de queda, han comenzado a mostrar su rechazo poco después de conocer los nuevos nombramientos.
Omar Suleiman, jefe de los servicios secretos, se hara cargo de la vicepresidencia, mientras que Ahmed Chafik, ex comandante del ejército del aíre, será el nuevo Primer Ministro.
El nombramiento de Suleiman es histórico, ya que desde que Mubarak ascendiese al poder en 1981, nunca había contado con un Vicepresidente.
No obstante, los ánimos en las calles siguen exaltados, porque estos nombramientos se perciben como un endurecimiento del ejecutivo, lejos del cambio radical que solicitan los manifestantes y que pasa por que Mubarak abandone su cargo.
Pese a que los manifestantes, que superan los 400.000 en El Cairo, no han respetado el toque de queda, las protestas se mantienen con relativa calma.
Sólo en la plaza de Tharir hay unas 50.000 personas, aunque el ejército, al que se le ha encargado la vigilancia en exclusiva del centro de la ciudad, mantiene el control sin grandes altercados, pese a que esta mañana numerosos manifestantes sí intentasen, sin éxito tomar el Ministerio del Interior y el edificio en el que el Banco Central imprime el dinero.