"Digo con honestidad que en cualquier lugar donde el Ejército libanés sea atacado y haya una presencia de la resistencia, y sea capaz, la resistencia no permanecerá en silencio, o quieta, o contenida", declaró Nasralá. "La mano israelí que ataque al Ejército libanés será cortada", dijo en un mensaje de vídeo dirigido a decenas de miles de seguidores.

El jefe del movimiento chií afirmó que su grupo no permitirá violaciones del territorio libanés de parte de Israel y ofreció el apoyo de su milicia armada para reforzar al Ejército del Líbano. "Si las operaciones militares cesaron, las agresiones israelíes continúan", dijo Nasralá, dirigiéndose por vídeo, desde un lugar desconocido, a miles de seguidores reunidos en una plaza del sur de Beirut.

Según Nasralá, lo sucedido en la frontera es una "forma de la agresión continúa del enemigo". También dijo que la "resistencia" (milicia de Hizbulah), "en estado de máxima alerta", no quiso intervenir, aunque informó a las autoridades competentes que estaba a su disposición. "Nuestro mensaje es claro: el Líbano no va permitir ninguna violación de su territorio, va a hacer frente con valor y sin miedo", afirmó Nasralá en su mensaje, que siguieron representantes de la Presidencia, del Gobierno y del Parlamento.

"El enemigo -agregó- se sorprendió de que el Ejército, signo de la dignidad de los libaneses, respondió. En cualquier lugar que haya una agresión estará la 'resistencia', y la mano que va atacarla, la cortaremos". "La resistencia luchará. La resistencia apoya al Ejército, y el Ejército a la resistencia", insistió.

También se quejó de que, desde que terminó el conflicto armado del 2006, Israel ha cometido 7.000 violaciones de la resolución del Consejo de Seguridad que marcó la suspensión de las hostilidades y, añadió, "el mundo entero no ha movido ni un dedo por eso".