El dirigente cívico Germán Antelo acusó al gobierno de estar ''creando grupos paralelos paramilitares'' que desfilaron el martes ''encapuchados con ponchos rojos y con fusil''. ''Eso, lógicamente, no es tolerable, eso va en contra del marco democrático''.

Recordó que en septiembre, rememorando los tiempos en los que formó parte del desaparecido Ejército Guerrillero Tupac Katari (EGTK), el vicepresidente Alvaro García mencionó también en Omasuyos que caminaba por la zona con ''el fusil bajo el poncho''.

Antelo, quien es presidente del Comité Cívico de Santa Cruz, el departamento más rico y extenso de Bolivia, señaló que es ''vergonzoso'' que los campesinos desfilaran ''delante de las fuerzas (armadas) y con los aplausos de los mismos (jefes militares)'' y que en la institución castrense ''se tolere este tipo de actitud''.

Ante las críticas, el ministro de Defensa, Walker San Miguel, salió a defender al gobierno señalando que iniciará una campaña para tratar de desarmar a los campesinos de Omasuyos y que ellos sólo portaban antiguos fusiles Mauser.

La región fue escenario en 2003 de enfrentamientos a balazos de campesinos con la policía y el ejército, que dejaron varios muertos.

En el acto del martes, Morales pidió el apoyo de los campesinos a su gobierno, vestido también con el pocho rojo de guerra que vistieron los agricultores. También se puso uno, desfiló y aplaudió a quienes marcharon, el comandante del ejército, general Freddy Bersatti, a quien la oposición identifica como oficialista.

Bersatti dijo el miércoles que fueron ''desubicados'' los campesinos que portaban los fusiles, en tanto que San Miguel señaló, en contra de algunos informes de prensa que hablan de un número mayor, que los fusiles Mauser ''eran tres''.

El ministro indicó que se trató de una manifestación de ''reafirmación cultural'' de los campesinos. ''En ningún caso, atuendos culturales, atuendos que representan a una región del país pueden significar una amenaza para nadie'', agregó en rueda de prensa al referirse a los ponchos rojos, que en Omasuyos son usados por los indígenas en caso de guerra.

El dirigente de la principal fuerza opositora, Podemos, José Aruquipa dijo a la AP que ''es preocupante que el gobierno insista en esta actitud de instigación, ver cómo sigue usando a la movilización de grupos de choque, en este caso grupos de choque armados irregulares, ante los medios y la ciudadanía''.

A su vez, el diputado de la también opositora Unidad Nacional (UN) dijo que ''es lamentable ver cómo en las fuerzas armadas existe una subordinación indignante y humillante'' a Morales.

''Las fuerzas armadas han visto ayer (martes) un desfile protagonizado por campesinos portando armas de fuego, eso sin ningún accionar de las fuerzas armadas, más aún del Presidente de la República'', sostuvo.

''Son milicias, no grupos de choques, son grupos fascistas este ejército armado en Omasuyos'', agregó.