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19/02/2017 | Argentina- Mauricio Macri: ''Argentina sufrió mucho por el populismo''

César González Calero

El presidente de Argentina repasa su primer año en el cargo criticando la herencia de los Kirchner y pidiendo paciencia con sus medidas económicas

 

Un año después de haber llegado a la Casa Rosada, Mauricio Macri, el líder conservador que acabó con 12 años de gobiernos kirchneristas, visita España en viaje oficial la próxima semana con el objetivo de apuntalar las relaciones bilaterales con el Gobierno de Mariano Rajoy ("tenemos muy buena comunicación") y atraer inversiones para una economía que no acaba de despegar.

Macri, de 58 años, llega a España en un momento de revuelo político por las fuertes críticas de la oposición ante varias medidas polémicas adoptadas por su Gobierno. El líder conservador asegura que pese a los errores que se puedan cometer, la transparencia continúa siendo la bandera de su presidencia, y no duda al comparar su manera de ejercer el poder con su predecesora, Cristina Fernández de Kirchner, a quien acusa de haber intentado "chavizar" el país. "Argentina sufrió mucho por el populismo", se lamenta el mandatario en un encuentro en su residencia oficial de Olivos (a las afueras de Buenos Aires) con un grupo de medios españoles, entre ellos EL MUNDO.

Macri llega a España el martes ("un viaje muy importante por el afecto que nos une") dejando atrás una crisis política por el escándalo de la renegociación de una deuda millonaria que la compañía de su padre contrajo con el Estado hace 15 años. La presión de la oposición le obligó a dar marcha atrás al acuerdo pero la imagen del Gobierno se ha visto dañada por los reproches de la oposición.

Sin embargo, pese a los errores cometidos (y reconocidos) en su primer año al frente del poder Ejecutivo, la imagen de Macri continúa todavía en niveles altos (alrededor del 50%) y Cambiemos (la coalición oficialista) espera que el carisma del mandatario arrastre a sus candidatos en las decisivas elecciones legislativas que se celebrarán en octubre.

Pero los errores y las causas judiciales abiertas contra Macri (Papeles de Panama y el caso de la deuda contraída por su padre, entre otras) han erosionado la imagen del Gobierno, aunque el mandatario matiza: "Hemos hecho cosas muy contundentes. Si los jueces quieren investigar, le damos información, aunque tenemos una procuradora (fiscal general), (Alejandra) Gils Carbó, que es una militante kirchnerista". Para el líder conservador, en ninguna de las denuncias presentadas contra él se ha podido demostrar "absolutamente nada". "No hay hechos consumados que acrediten lo que se denuncia".

Desde su llegada al poder, Macri ha asumido un liderazgo regional que le sitúa como uno de los referentes del bloque conservador frente al eje bolivariano. El presidente estadounidense, Donald Trump, mencionó la crisis de Venezuela en la charla telefónica que mantuvo esta semana con Macri, y el ex presidente de Boca Juniors no oculta su rechazo hacia el Gobierno de Nicolás Maduro: "Venezuela no es una democracia. Hay una seudo Corte Suprema. No se respetan los derechos humanos. Las cosas están peor que hace un año. A los argentinos nos toca de cerca el tema porque el gobierno anterior estuvo al borde de 'chavizar' la Argentina y tuvimos que luchar mucho para evitarlo". "Nosotros hemos demostrado vocación de ayudar para que se vuelva a elegir democráticamente en Venezuela, pero Maduro se opuso", asegura el mandatario ante el liderazgo creciente que está asumiendo en Sudamérica.

Para el líder conservador, el enemigo principal es el denominado "populismo": "El populismo es como un padre que invita a toda su familia a Europa a hoteles de cinco estrellas y cuando vuelven, el padre liquidó la casa (...) Vivir un momento maravilloso para después darte cuenta que quebró el país, y quedó sin reservas y sin infraestructuras". Sobre el "populismo" de Trump, Macri se muestra más condescendiente: "Hay que darle tiempo, como dijo el Papa".

Uno de los objetivos políticos de Macri es, precisamente, despegar a Argentina de la imagen exterior que tenía el país durante el kirchnerismo. Pero pide paciencia: "Hay que darle tiempo al proceso. Nosotros estamos planteando unos cambios muy profundos y muchos se resisten al cambio y dicen que no sabemos hacer política, aunque esos fueron los mismos que nos dejaron una situación de inequidad social. El cambio no es de un día para el otro y yo no soy infalible. Tomamos miles de decisiones y vamos a cometer errores. Lo importante es corregir cuando haya un error".

El primer año de Macri en el Gobierno ha estado presidido por una recesión económica, una altísima inflación (40%) y una pérdida de poder adquisitivo de las clases medias y bajas, factores que el oficialismo achaca a la "pesada herencia" del kirchnerismo.

Esa coyuntura negativa se pretende revertir este año si se cumplen las previsiones de la Casa Rosada y la inversión extranjera impulsa el crecimiento. "Nada se hace de un día para el otro -sostiene Macri- pero nuestra tendencia es buena, la inflación está bajando y los indicadores del último trimestre y de enero muestran una reactivación económica. Nos falta mucho y hay que seguir trabajando porque uno de cada tres argentinos se encuentra en la pobreza".

Y sobre la ausencia de inversiones extrajeras, Macri insiste en que su llegada al país es cuestión de tiempo, y asegura que ya hay apalabrados varios miles de millones de dólares en sectores estratégicos de la economía, a falta de su materialización. Un proceso en el que España está llamado a jugar un papel relevante.

El Mundo (España)

 



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