Especialista en asuntos internacionales del Pro (Propuesta Republicana), partido que lidera Mauricio Macri en la coalición Cambiemos, Fulvio Pompeo, traza las líneas maestras que defiende su agrupación para el futuro de Argentina. Su nombre suena como ministro de Asuntos Exteriores si Macri ganara las elecciones, pero se resiste a aceptarlo. «Primero hay que esperar los resultados. Además, somos un equipo y no hay nada decidido».

-¿Qué relaciones internacionales debería tener Argentina tras este ciclo «Kirchnerista» de cierto aislamiento?

-Nosotros trabajamos con el objetivo de insertar Argentina en el mundo. Hoy la vemos alejada o con socios de una manera que no nos sirven para lograr nuestras metas que son: Pobreza cero, lucha contra narcotráfico y la unión de los argentinos. Por eso damos prioridad a dos ejes centrales como marco conceptual: uno son los objetivos de desarrollo sostenible de Naciones Unidas y el otro el discurso del Papa donde el ser humano es el objetivo central de la política exterior.

-¿Con qué bloques comerciales sienten más afinidad?

Nosotros creemos que, geográficamente, nuestro eje es el Mercosur (Mercado Común Suramericano). Tenemos que profundizarlo, sincerarlo y advertir la crisis de la situación venezolana actual. Sin olvidar una búsqueda con la Alianza del Pacífico y lograr una visión bioceánica de Argentina con Chile.

-¿Qué tipo de relaciones considera que debe mantener Argentina con Europa y Estados Unidos? ¿Cómo analiza los pactos con Rusia y China que han despertado ciertas suspicacias?

-Son acuerdos recientemente firmados que habrá que desarrollar a futuro. Nosotros queremos también buscar equilibrio con Europa y con Estados Unidos que fueron dos bloques, por parte de Argentina, mal entendidos o maltratados. Queremos profundizar esa relación.

-¿No ha mencionado antes Unasur?

Hay que trabajar con ellos, es un bloque sudamericano al que pertenecemos como la Celac. También queremos abordar un desafío nuevo en la OEA, organización que Argentina ha tenido muy abandonado. Creo que, luego del restablecimiento de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos, se puede lograr. Hay que relanzar la OEA y que Argentina sea un actor clave como lo fue en sus orígenes.

-Mauricio Macri propone aplicar la cláusula democrática del Mercosur para expulsar a Venezuela si no libera a los presos políticos y no respeta los derechos humanos. ¿A qué atribuye que ningún otro país de la región haya secundado la propuesta?

- No se por qué los otros países no proponen lo mismo. Lo que hagan otros países lo veremos en el foro que corresponda y lo discutiremos en su momento… Hay una suerte de dominio ideológico en la región que, en el fondo, no le sirve a la población en sí mismo y en particular, creemos que valores como la libertad no se pueden negociar de cualquier manera. Lo que hizo el gobierno kirchnerista fue ser socio del Gobierno venezolano pero también tenemos que preocuparnos por el pueblo venezolano. La relación, el compromiso más importante es el respeto de las libertades. Por eso lo ponemos en crisis desde el Mercosur donde pertenece Venezuela aunque le falten cumplir algunas normas para ser miembro pleno.

-Argentina necesita inversiones y recuperar la confianza en el exterior ¿Cómo puede lograrlo?

-Con reglas claras, transparencia, un equipo con vocación de insertar a Argentina en el mundo y con humildad. Es la única manera de lograr que empiecen a venir inversiones a Argentina, no solamente como fin en sí mismo sino para que generen trabajo. Nuestros ejes centrales con los mencionados: pobreza cero y eso es central

-Mauricio Macri se identifica con el PP. ¿En que espejo se mira la coalición Cambiemos?

-El espejo es principalmente el trabajo con la gente: Tenemos catorce millones de pobres en la Argentina. Particularmente hemos trabajo muy bien con el PP, en la alcaldía con Alberto Ruiz Gallardón y tenemos buena relación con Mariano Rajoy pero hoy no es el tema ideológico el que debemos plantear. El Gobierno español debe estar intentado hacer lo mejor para España como nosotros para Argentina, sea éste de izquierda o de derechas, la idea es profundizar la relación para tratar de, en nuestro caso, erradicar la pobreza.

-¿Medida más urgente en política internacional?

Las primeras medidas tienen que ser internas. Desde ahí vamos a poder contar afuera qué tipo de país queremos ser. Hay que hacer primero los cambios internos para que confíen en los externos.