Saben que la mejor manera de llegar al corazón de sus enemigos de manera inmediata es Internet, son las redes sociales. Y los terroristas de Estado Islámico controlan y manejan a su antojo una puerta abierta para divulgar sus matanzas. 'Juegan' con la estrategia del miedo y tratan de meter ese miedo en casa de todos, a través de la difusión inmediata de su crueldad. Es el terror del Siglo XXI, es el terror casi en tiempo real.

Un estudio pormenorizado, iniciado justo después de que fuera difundido el vídeo del asesinato del periodista norteamericano Steven Sotloff demuestra una planificación detallada para distribuir ese vídeo y sortear los controles en la red. Una de las peculiaridades, por cierto, es que la trama criminal utiliza redes sociales de Rusia para comenzar a distribuir su material sangriento.

Según un detallado y completo informe elaborado por el investigador y especialista en redes sociales y asuntos árabes Javier Lesaca, en apenas seis horas, los terroristas del ISIS habían puesto en marcha una perfecta maquinaria en la red para burlar controles y hacer accesible su vídeo a cualquiera que quisiera buscarlo. De hecho, aún hoy, en viable encontrar las imágenes del asesinato en páginas asentadas hasta en los propios Estados Unidos.

El estudio elaborado por Lesaca indica como datos principales que los terroristas difundieron el vídeo de la decapitación del periodista a través de una red social rusa y un programa de encriptamiento del MIT. Durante las primeras seis horas tras la decapitación, más de 1.700 cuentas de Twitter publicaron 3.000 tuits difundiendo y justificando la decapitación.

La Inteligencia estudia el material

Es un material que está en estudio de la Inteligencia sobre todo norteamericana, registrar el perfil de aquellos que tras observar el vídeo dejaron pulsada la pestaña de 'me gusta'. No sitúa a un terrorista, si duda, peros si a alguien que por lo menos tiene simpatías con quien ha perpetrado tamaña crueldad. Y esos datos se registran, se comprueban y se siguen.

Una productora multimedia de vídeos yihadistas, una red social digital rusa, un programa de encriptamiento del MIT, una plataforma digital de microblogging norteamericana y un ejército perfectamente jerarquizado y engrasado de activistas digitales. Estas fueron las herramientas que los terroristas del Estado Islámico utilizaron para extender el terror a todos los rincones del planeta en menos de 6 horas, detalla el estudio.

Según el seguimiento de este investigador, a las 23.15 horas (horario de España), seis horas después de haberse hecho público el vídeo, los tuiteros del ISIS, a través de dos 'hashtags' en inglés y otros dos en árabe, habían colgado 768 enlaces con la la decapitación de Steven Sotloff y más de 3.000 tuits en árabe y en inglés apoyando la ejecución, lanzando nuevas amenazas, mofándose del periodista asesinado y dando gracias a Dios por la decapitación.

La campaña en inglés, a través de los 'hashtags' #Asecondmessagetoamerica y #A_second_message_to_america, fue conducida por apenas medio centenar de cuentas yihadistas, que se encargaron de colgar los vídeos, ofrecer fotografías de la decapitación y crear mensajes de justificación de sus crímenes.

Creando contenido a la crueldad

Estas cuentas, responsables de la creación del contenido y de fijar los mensajes, escribieron en apenas seis horas 500 mensajes originales, que fueron retuiteados por otras 1.200 cuentas, elevando el total de tuits de la campaña hasta los 2.100 mensajes que llegaron de manera directa a más de 2,5 millones de usuarios únicos de la red social Twitter. Algunas cuentas tuitearon en apenas seis horas hasta 14 veces el vídeo de la decapitación. La mayoría de estas cuentas permanecen abiertas y en activo.

El vídeo de la decapitación de Steven Sotloff se colgó en la red social rusa vk.com a las 17.15 hora española. El enlace provenía de la cuenta que la productora de propaganda yihadista AlItisam tiene en esta plataforma social, a la que los yihadistas han trasladado toda su infraestructura de propaganda digital.

El informe de este investigador señala que el vídeo había sido grabado y editado por otra productora del ISIS, Al Furqan, cuyos cientos de vídeos jaleando el terrorismo internacional circulan sin ningún tipo de control por las redes sociales de todo el mundo, incluido Youtube o Daily Motion.

El mensaje colgado en la red social rusa estaba escrito en lengua árabe y decía lo siguiente:

"Pronto va a ser publicada una nueva entrega de la Fundación Al Furqan, con título: «Una segunda carta a los Estados Unidos» «Un segundo mensaje a Estados Unidos». Versión de dos minutos y 46 segundos"

Claves del Instituto Tecnológico de Massachussets

El mensaje incluía las claves de encriptación del programa informático MD5 creado en 1991 por el MIT y que tiene como fin comprobar que un archivo digital no ha sido manipulado, ni hackeado antes de ser abierto.

A las 17.16 (hora española), justo un minuto después de colgarse el post, la cuenta de Twitter @oranizoheir (https://twitter.com/OraniZoheir) se hacía eco del post e iniciaba una conversación que incendiaba Twitter a través de los cuatro 'hashtags' (dos en árabe y dos en inglés) antes mencionados.

Algunas cuentas de Twitter como @faluja234 mostraban su alegría por las noticias que llegaban a través de la red social y animaban a los tuiteros a difundir la noticia: "¡Hermanos! Difundid a gran escala el hashtag "Unsegundomensajeparamerica". Parece que, si es voluntad de Alá, la Fundación Al Furqan hará pública la ejecución del segundo rehén americano".

Diez minutos después, a las 17.30 el vídeo ya estaba colgado de manera libre y abierta en las redes sociales de Youtube, Daily Motion, Internet Archive y en varias webs de descargas multimedia de Oriente Próximo.