La maquinaria de generar pobreza, así como la confusión entre Bandas, Maras, Narcos y Carteles, invitaron al Crimen Organizado a instalarse en el territorio argentino encontrando, en determinadas provincias, espacios más que propicios para desarrollarse y construir Poder. Así es como paulatinamente, y bajo la construcción del Estado de Sensación, creado por el Simulacro Nac & Pop, las diversas organizaciones criminales se sintieron atraídas e "invitadas" a arribar a nuestro país. Y las que ya estaban, desde años anteriores, experimentaron un reordenamiento dentro de las áreas ocupadas.

Organizaciones que fueron testigos de la abulia, la negación y la sigilosa connivencia de los grandes grupos del poder político y económico con un flagelo -El Narcotráfico- que se perfilaba como uno de lo más terribles del Siglo XX y que encontraría, su máxima expresión, en el Siglo XXI, al instalarse en países que aún, lo percibían de manera embrionaria y/o pasajera.

Argentina: El Edén Narco Mara

Atravesados por la ignorancia, con negación oficial e insolvencia opositora, el tema del Narcotráfico cuando no se minimiza, se trata con conmovedora insustancialidad. Con una zaraza atada con alambre para dirimir, en los medios de comunicación, divismos políticos mientras la sociedad experimenta y padece, con la vida que se rifa, las acciones de delincuentes voraces que se acomodan en células importadas, así como el organizaciones fusionadas y encontradas para copar el país.

No existe, en la Argentina de Hamlet, un continente para frenar el avance de algo que ya se instaló. Que supo penetrar en el país, bajo el ala de los Narcotraficantes locales que marcaron espacios y logística de manera brutal, hasta configurarnos, dentro de lo que era el Triángulo Embrionario Sur, como el País Narco Mara por excelencia. Por encima, sin duda, de Chile y Uruguay.

Un Edén para que las Pandillas mutaran a Maras por coptación y/o captación de Narcos. Aportándoles una infraestructura y una estructura de solvencia para poder avanzar en el campo de acción criminal. Un Edén para que esas organizaciones, ya articuladas, mantuvieran la cadena de fusión como Narco Maras, o bien, la cortaran iniciando la cadena de traiciones. Maras por un lado, Narcos por el otro. 


Puntos de la Secuencia:

1- Las Bandas amenazan y realizan delitos menores. A más respaldo de exonerados o Mala Policía, cometen un asesinato para trascender.

2- Trascendida la Banda, con apoyo de Mala Policía, Exonerados y/o Narcos conforman Las Maras. El delito crece. Entre amenazas y acción directa.

3- Convertidos en Narco Maras o Narcos, hacen llamadores. Avisos al Poder para no ser coartados en el espacio que le liberaron para operar. Con ellos, ahora, hay que pautar la "convivencia".

4- Cuando los Narcos se unen para dar estructura, articulación y logística a su acción, forman el Cartel. Es decir, el Cartel está integrado por aquellos que fueron escalando, hasta consolidarse en una Organización Narco real. Sin simulacros. Afianzada. 

Un cartel local o un cartel con integrantes, como tenemos, de combinados:

1- Colombianos con argentinos. Operan en todo el territorio nacional. Sus jefes tienen bases en Countrys, Barrios Privados y Mansiones, por lo general, en la Provincia de Buenos Aires. Zona Norte. Nordelta y Pilar. 
Además de los espacios nuevos,  bien dispersos de Haras, en la zona Sur. Se mueven, por lo general, por fuera de las Villas. Fluctúan, sus células, en rutas y fronteras. Y en el Micro-Centro de CABA. 

2- Mexicanos (Zetas) con argentinos. Operan también a nivel Nacional. Sus bases son privadas y hasta el momento, han sido más cuidadosos y astutos que los colombianos. Su radio de acción, en donde entran en puja con las células colombianas, es el Norte Argentino. Territorio en el cual, adoctrinan a niños marginados de continentes emocionales y educativos siguiendo el Modelo que convirtió a México, en un Estado Narco. 

3- Peruanos con argentinos. Operan en la 1-11-14 y en la Villa Fraga. Allí dentro liberan las Batallas. Y están en puja, ambos contingentes de Narcos Peruanos, por el territorio a controlar. Con el condimento, de que en la Villa Fraga, armaron nexos Narco Delictivos con las casas tomadas del barrio porteño de Villa Ortúzar. (Ver nota: http://www.soclauraetcharren.blogspot.com.ar/2012/11/nexos-narco-delictivos-chacarita-y.html) Sus jefes, también se reclutan en zonas privadas.

4- Paraguayos con argentinos. Coparon la Villa 20. Y en Provincia, Villa Corea. (Barrio humilde del cual, se apoderaron los Narcos) Mientras que la 31 bis y el Barrio Chino, conjugan un poco de todo.

5- El resto de las Villas y asentamientos en todo el país, reciben el flujo de Narco Maras golondrinas locales e importadas que coquetean hasta encontrar EL ESPACIO.


De Villas Miseria a Narco Villas: LA FRAGA

Villas que de Miseria pasaron a Narcos. A donde algunos integrantes de agrupaciones con fetiche solidario, te invitan a caminar las dos primeras cuadras. Las cuadras del velo. De la tensa calma. Aunque en la Fraga, la bienvenida, es la de los puntos rojos en la pared, de muerte a la Policía. 

Narco Villa con gente de trabajo presa de los "trabajadores" de la droga que dejaron a sus pandilleros soldados para controlar el lugar que cuenta, dos veces por semana, de acuerdo a informantes claves, con transas de descarga que arriban con procedencia de la ruta 34 y que luego, se distribuyen entre CABA y Provincia de  Buenos Aires.

Los días no están estipulados. Cambian. Porque La Fraga aún, es casi invisible. Subestimada. Cuando en realidad, goza de la astucia de crecer en el centro y a la vista. Y por ende, se convierte en un centro muy apetecible para que los incitadores del caos de la renta, la sigan haciendo crecer por fuera del panóptico. Con importación y formación local.

"Los Monos": Banda que se perfila como el primer cartel local en acción visible.

 El orden del PBI delictivo, en Argentina, ha ido cambiando porque el delito -a pesar de las desafortunadas e ignorantes afirmaciones del Sr. Jefe de Gabinete Capitanich- no disminuyó, ni se mantuvo como en el año 2001. El delito, en Argentina, mutó a Narco Crimen y la medición, ya no puede ser la misma.

Esa situación de mutación, hizo que el PBI, sufriera un reacomodamiento:

• Santa Fe (Rosario).
• Córdoba.
• Provincia de Buenos Aires.
• CABA. Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
• Mendoza.
• Resto del país.

Ocurre, que los Gobiernos de Santa Fe, con el socialismo a la cabeza, le rifaron la provincia  al Narcotráfico poniendo en jaque a la sociedad que ahora es rehén de una Guerra que recién empieza, ya que la lógica Narco es: "Si nos dieron el espacio y la logística. Además de la maquinaria de la pobreza, cuál es la razón sustancial ahora, para que nos vayamos". 

De este modo, Santa Fe, es una cápsula Narco dentro de un país Narco Mara. Porque mientras la atención estaba puesta en las Pandillas más emblemáticas de Rosario, como "Los Ninios Populares" y "Las Favelas", por el otro lado avanzaban, sin tregua, y con jactancia, "Los Monos".

Se trata de la Banda organizada que mejor supo importar la metodología de los Carteles Mexicanos y Colombianos, siguiendo más la tradición de los primeros en cuanto a que comenzaron siendo organizaciones de pandilleros "sofisticados" con apoyos dentro del fútbol, Mala Policía, Exonerados y Gobiernos que con abulia, fueron estratégicamente conniventes.

Hoy, "Los Monos", son la Banda Criminal que se perfila en la construcción del primer Cartel local de Argentina con construcción de Narco Túneles, el método de las Narco Palomas y un conglomerado mafioso que excita, dentro del mundo Narco Terrorista.

Un Organización con fuertes aspiraciones a Cartel y sin fachada solidaria. Organización que no avisa porque comprendió y asimiló que lo de Argentina, con los modelos Narco Demenciales de Centroamérica, no puede ser otra cosa, en materia de Narco Maras, que una decisión de ser, reproduciendo lo peor.

Por eso es, que "Los Monos", se valieron de la Ignorancia y la Pobreza. Las dos variables que homologan al Gobierno Nacional en su ficción progresista, con el Socialismo, en su ficción de equidad. Pero también, se nutrieron de la voraz corrupción que transformó el tejido social quebrado, en perforado.