Los residentes de la Coste Este y las aseguradoras también afrontan pérdidas por miles de millones de dólares ocasionados por la tormenta. La firma de modelización de catástrofes AIR Worldwide estimó que las pérdidas patrimoniales provocadas por el viento y las mareas tormentosas podrían totalizar entre 3,000 y 6,000 millones de dólares (mdd). 

Las estimaciones de pérdidas de bienes no asegurados son incluso mayores. Kinetic Analysis Corp., firma que calcula el impacto en la economía de los desastres de origen natural y humano, indica que la cifra puede ascender a 7,000 millones de dólares. Menos de la mitad de ese monto, unos 3,000 millones, serán cubiertos por compañías aseguradoras.

Miembros del gabinete del presidente Barack Obama viajarán este martes a Virginia, Carolina del Norte y Vermont (los estados más afectados), para inspeccionar los esfuerzos de respuesta al desastre, señaló el Departamento de Seguridad Nacional.

Irene ha ocasionado la muerte de al menos 27 personas en nueve estados; mientras que en Vermont todavía hay una persona desaparecida.

A un día de que la tormenta se alejara de territorio estadounidense, el lunes por la noche Vermont aún registraba crecidas de aguas. "Es devastador. Comunidades enteras bajo el agua, negocios, hogares, caminos, puentes, infraestructura ferroviaria. Hemos perdido cultivos agrícolas", declaró el gobernador del estado, Peter Shumlin.

El lunes, cientos de personas seguían atrapadas en comunidades aisladas por las riadas que dañaron o destruyeron 263 caminos y puentes, dijo Shumlin, si bien admitió desconocer con exactitud el número de personas en esa situación.

Las predicciones indican que el Río Passaic, en Nueva Jersey, continuará creciendo este martes, duplicando el nivel que se cataloga como ‘inundación' en algunas áreas.

El pueblo de Prattsville, ubicado en el estado de Nueva York y a más de dos horas de distancia de la línea costera, está ahora virtualmente irreconocible. La zona se inundó cuando el caudal del río Schoharie Creek aumentó más de 4.5 metros en menos de 12 horas y las intensas lluvias concentradas en las Montañas Castkill descargaron un volumen de agua mayor al de las cataratas del Niágara, anegando el pueblo, explicó Shaun Groden, administrador del Condado de Greene.

"La gente no puede volver a sus casas. Se quedaron sin nada, todos los pisos enlodados, los coches en el techo. Lo han perdido todo", apuntó Elsie Stuppert, empleado del hotel Hideaway en Prattsville.

Además de las continuas riadas, los residentes de la Costa Este sufren cortes de energía eléctrica. Para el lunes, cerca de 5 millones de clientes no tenían electricidad, señaló Craig Fugate, director de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias, citando números del Departamento de Energía.

El proveedor de servicio eléctrico Connecticut Light & Power reportó el lunes por la noche que aproximadamente medio millón de personas no tenían luz. Algunos usuarios tendrán que esperar una semana o más para que el servicio se restablezca, debido a daños en el sistema.

Los estragos ocasionados por Irene en el sector de transporte apenas comienzan a desaparecer. Amtrak anunció que el servicio ferroviario entre Nueva York y Boston se reanudaría este martes. Mientras, las aerolíneas se recuperan tras cancelar miles de vuelos durante el fin de semana.

Entre 650,000 y 700,000 viajeros se quedaron en tierra desde el viernes pasado debido a las cancelaciones ocasionadas por Irene, calculó Daniel Baker, CEO de FlightAware.com, servicio de rastreo de vuelos.

De acuerdo con un portavoz de la aerolínea JetBlue, tomará algunos días para que las personas lleguen a sus destinos.

Martes y miércoles suelen ser los días menos demandados para volar, lo que ayudará a los viajeros a conseguir el vuelo que desean, comentó Todd Lehmacher, vocero de US Airways.

El verdadero alcance de los daños ocasionados por Irene no se sabrá pronto. El Gobierno estadounidense estima que solamente el costo de los daños producidos por el viento excederá los 1,000 millones de dólares. Los analistas han anticipado el costo total de Irene en una cifra muy superior.

Con todo, las acciones bursátiles de las compañías aseguradoras Travelers Companies Inc., Hartford Financial Services Group y Allstate subieron el pasado lunes, tras comprobarse que los perjuicios no fueron peores. Los papeles de Metlife y Chubb Corp. también se elevaron.