Inteligencia y Seguridad Frente Externo En Profundidad Economia y Finanzas Transparencia
  En Parrilla Medio Ambiente Sociedad High Tech Contacto
En Parrilla  
 
26/06/2005 | Pueblo o patota?

Gustavo Linares Benzo

Los acontecimientos de Bolivia de estos días hubieran ocurrido en Venezuela sin la democracia comenzada en 1958. El discurso que Chávez y sus ideólogos dicen aquí son lamentablemente verdad allá. Un siglo XX de desgobierno, una riqueza mineral que jamás llegó al pueblo; por el contrario, los dictadores militares, mientras aquí el presidente.

 

Betancourt repartía tierras de verdad, practicaban una antirreforma agraria creando latifundios en manos de los terratenientes blancos. Toda esta venalidad ocurría con tres quintos de población indígena que no tuvo ni un solo diputado hasta que Evo Morales fuera electo hace pocos años.

Con un humus así, no es de extrañar la zozobra y la ansiedad de los años recientes, luego de algunos lustros de paz debido a líderes de siempre como Paz Stenssoro y Banzer. Las reformas estructurales del FMI, que de razonables y pragmáticas al comienzo se convirtieron en dogmas al pasar el tiempo, deshilacharon el frágil tejido social y desataron las más bajas fuerzas sociales que literalmente secuestraron al país los días pasados y lo tienen sometido al chantaje de satisfacerlas o la guerra civil.

Unos datos revelan cuán falso es el aura heroica que rodea a los insurgentes. Evo Morales aparece en las encuestas de la semana pasada con 6% de popularidad. Muchos de los espontáneos del pueblo que sitiaron La Paz estaban pagados, mientras que la mayoría de los habitantes de El Alto, esa barriada que da acceso a la ciudad, desesperados por la falta de víveres y medicinas, pretendía oponerse al bloqueo pero no lo hacía ante las amenazas.

La popularidad de Morales cae en picada luego de los disturbios, pues como siempre los más afectados han sido los pobres, su principal base electoral. Ya éste ha intentado en el pasado asumir posiciones más moderadas, pero las presiones de los más radicales, Felipe Quispe y sus mecenas internacionales Castro y Chávez, lo han llevado a la ultra. Pareciera que Castro, luego de percatarse que en Venezuela no va a poder implantar, o al menos no tan rápido, un totalitarismo a la cubana, se haya dado cuenta que en Bolivia será más fácil para luego desde allí exportar la revolución. Ya los fondos están en Venezuela.

Vendrán elecciones pronto. Desde Caracas, que es muy lejos, pareciera lógico que un país donde 60% es de raza indígena el presidente también lo sea, pero que gobierne para el pueblo y no para los poquitos radicales. Y con respecto a la nacionalización del petróleo y de las minas, nosotros sabemos mucho: cuando estaban las transnacionales y no había OPEP, el precio estuvo estable en tres dólares por 50 años; desde que nacionalizamos y la OPEP manda, el precio promedio se triplicó. Así que Bolivia merece paz y prosperidad, y para ello más poder para las etnias, más Lula y menos Chávez y nacionalizar e inscribirse en la OPEP.

f1981@telcel.net.ve

El Universal (Ve) (Venezuela)

 


Otras Notas Relacionadas... ( Records 1 to 6 of 6 )
fecha titulo
07/07/2005 Venezuela, una provincia más de la abominable tiranía castrista
30/06/2005 Dialogar mejor y debatir menos
26/06/2005 Obstáculos a la democracia
26/06/2005 La “aristocracia” política
26/06/2005 Costa Rica- Deuda política: ¿Se justifica?
26/06/2005 Oposición y Estado


Otras Notas del Autor
fecha
Título
29/03/2009|
28/03/2007|
22/05/2006|

ver + notas
 
Center for the Study of the Presidency
Freedom House