Inteligencia y Seguridad Frente Externo En Profundidad Economia y Finanzas Transparencia
  En Parrilla Medio Ambiente Sociedad High Tech Contacto
En Profundidad  
 
24/04/2005 | Culturalmente inaceptable, políticamente tolerable - El trabajo infantil, solo puede existir si es tolerado cultural y políticamente

Rubén Hernán Weinsteiner

El trabajo infantil existe y en volúmenes importantes, los gobiernos lo saben y lo toleran. Es evidente que existe una relación entre el trabajo infantil y la pobreza, ya que los niños que trabajan son todos pobres. Pero la pobreza no es la causa del trabajo infantil; el hecho que la proporción de trabajo infantil, varíe drásticamente entre países de niveles similares de desarrollo económico, es clara muestra de esto. El trabajo infantil sólo puede existir si es tratado y tolerado como aceptable cultural y políticamente.

 

Camino por la Av. Rivadavia esquina Acoyte en la ciudad de Buenos Aires, hace calor y el sol de las diez y algo, me hace entre cerrar los ojos, a mi izquierda veo justo lo que necesitaba: cutters, seis cutters, de todos los tamaños y colores, azules, rojos, más gruesos más angostos, perfectamente blisteados. Los veo apoyados sobre una tela beige media sucia en el piso, detrás de la cual me sonríe con pocos dientes, pero con muchas ganas, un chico de unos trece años, de flequillo impecable, remera roja, de club de barrio, igualito al “puma Rodríguez”, no el cantante, sino aquel goleador de Español, Central y Racing, rápido simpático, no pierde tiempo, “lo sei por uno cincuenta”.

Increíble…, rápidamente pensé en los costos Fob y Cif, en la ganancia del importador en la ganancia del comerciante, en lo que se queda el que le da la mercadería al pumita, en la ganancia de este mismo, y me auto transporté en un “cuelgue” a China, pensando ¿Cuál es el costo de fábrica si a mi después de todo el proceso me cuestan los seis cutters un peso con cincuenta, casi medio dólar?

El puma Rodríguez, se llama Gonzalo y tiene doce, me dice, “son buenísimo” “ a mi no se me rompió ni uno”.

Le pago y le pregunto: ¿Vas a la escuela?

-“Ahora no, porque mi mamá esta enferma, ante iba…”

¿Donde vivís?

-“En Calzada…”- me asegura sin mirarme, mientras buscaba con la mirada al próximo cliente-

No pregunté por cantidad de hermanos, ni padre… las respuestas … las conocemos todos. Seguí caminando por Rivadavia pensando en donde encontraré al “Puma Rodríguez”, Gonzalo dentro de diez años…

Culturalmente inaceptable, políticamente tolerable

Resulta hoy modernamente atávico en la cultura de fin de siglo, pensar que los chicos no deben trabajar, el chico debe concurrir a la escuela, jugar, crecer como un niño, ir a un club, sociedad de fomento, jugar con amigos del barrio, siempre con un cordón de protección que lo ponga a salvo de los peligros tan mediáticos por estos tiempos.

Pero esto es cierto para todos o ¿Es válido solo dentro de una burbuja de menos del quince por ciento de la torta?

Desde una perspectiva del desarrollo, y la cultura finisecular, resulta inaceptable que un chico trabaje. Sin embargo en la primera mitad del siglo XX, era bien visto que un padre preparara a su hijo en el terreno laboral, ya sea incorporándolo como aprendiz en un taller o haciendo que trabaje una o dos horas por día, con el fin de adquirir responsabilidades o valorar el dinero ganado producto del trabajo.

Esta concepción, fue dejada de lado paulatinamente hacia la década del ochenta, donde las nuevas concepciones, giraron en torno a la necesidad de despojar al niño de todo contacto con el mundo laboral, teniendo en cuenta nuevas ideas evolutivas, con una ampliación de la currícula escolar, legitimando el aspecto lúdico, deportivo, extra curricular, la educación formal para el tiempo libre, y el ocio creativo

Pero este análisis solo se puede enmarcar dentro de un contexto de lo que comúnmente se llama clase media alta, o los no pobres, en América Latina.

Necesidades Básicas

El método de análisis directo más extendido en América Latina es el de la medición de las Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI), que se basa en una serie de indicadores censales, como calidad de la vivienda, acceso a servicios sanitarios y a la educación y ocupación del jefe de hogar.

En su análisis de los datos del Censo Nacional 2001, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) considera que un hogar es pobre por NBI si sufre al menos una de las siguientes carencias.

Hacinamiento: más de tres personas por cuarto.

Vivienda inadecuada: pieza de inquilinato, vivienda precaria u otro tipo, lo que excluye casa, departamento y rancho.

Condiciones sanitarias: falta de inodoro.

Menores no escolarizados: al menos un niño de 6 a 12 años que no asiste a la escuela.

Capacidad de subsistencia: cuatro o más personas por miembro ocupado y jefe de hogar que no haya completado el tercer grado de escolaridad primaria.

El Censo 2001 determinó que el 14,3% de los 10.075.814 hogares de la Argentina son NBI; en 1991 el porcentaje era 16,5%; en 1980, 22,3%. La proporción más alta de hogares NBI en 2001 corresponde a Formosa (28,0%), Chaco (27,6%), Salta (27,5%), Santiago del Estero (26,2%) y Jujuy (26,1%)

Líneas de Pobreza y de Indigencia

Las llamadas Líneas de Pobreza y de Indigencia consisten en un método indirecto para la identificación de los hogares y las personas que no logran satisfacer sus necesidades básicas.

Siguiendo la metodología del INDEC, el concepto de "línea de indigencia" determina si un hogar cuenta o no con ingresos suficientes para cubrir una canasta básica de alimentos (CBA). La "línea de pobreza" incorpora además otros bienes y servicios no alimentarios: vestimenta, transporte, educación, salud, etc., que conforman una canasta básica total (CBT).

Estas canastas se establecieron en función de los hábitos de consumo de la población que surgen de la Encuesta de Gastos e Ingresos de los Hogares. En cuanto a los ingresos de los hogares, se determinan a través de la Encuesta Permanente de (EPH), que el INDEC realiza en forma continua en los principales aglomerados urbanos del país.

En los sectores indigentes y pobres mas cercanos a la indigencia, el trabajo infantil se constituye en un dato, algo inevitable, ese trabajo puede o no enmarcarse dentro de la explotación.

En todos los casos el hecho de trabajar, por un fenómeno de escasez, privará al niño de horas de sueño, juego, tiempo en familia o educación formal o no formal.

La constitución del grupo familiar también condicionará las necesidades de trabajar del niño, es decir hogares donde el padre esta ausente y la madre discapacitada empujan al niño al mercado laboral, así como también hogares donde la madre debe salir a trabajar y el mayor  de los hermanos debe realizar la labor de cuidado de sus hermanos.

El trabajo infantil en una provincia como Formosa no constituye un fenómeno marginal, en cuanto a un marco de espacio y tiempo donde el niño concurre a un ámbito de trabajo. En este caso hay niños que no desertan de la escuela sino que trabajan y estudian aun con dificultad, y otros que se desertaron por propia decisión o se vieron expelidos por el sistema que no tolera la falta de cumplimiento en cuanto horas curricula, deberes, o el déficit de atención en clase producto del cansancio.

Pero en la Provincia de Buenos aires los chicos cartoneros, quizás desde una estructura menos formal dejan de concurrir a la escuela, para convertirse en niños exclusivamente trabajadores, los horarios en los cuales se trabaja, básicamente durante la noche, el tiempo requerido para juntar ordenar y clasificar cartones, metales y demás productos, los inhabilita para desarrollar otra tareas que no sean las laborales

Según la UNICEF

No todo el trabajo infantil, se ubica dentro de las formas más despreciables más peligrosas y explotadoras. Incluso los más fervientes partidarios del no-trabajo infantil reconocen que tareas apropiadas pueden aportar a los niños habilidades y responsabilidades, mantener unidas a las familias y contribuir a los ingresos familiares. Al evaluar el alcance del trabajo infantil y dibujar soluciones, es crucial definir qué es el trabajo infantil, y distinguir formas explotadoras de formas apropiadas.

Por eso, el primer análisis debe diferenciar entre trabajo y explotación, y entre trabajo apropiado e inapropiado para un chico.

La UNICEF ha desarrollado y establecido un conjunto de criterios básicos para determinar si el trabajo infantil es explotador.

Dicho esquema de parámetros define que el trabajo infantil es inapropiado si:

Es con dedicación exclusiva a una edad demasiado temprana,
se pasan demasiadas horas trabajando,
el trabajo provoca estrés físico, social o psicológico indebido,
se trabaja y se vive en la calle en malas condiciones,
el salario es inadecuado,
el niño tiene que asumir demasiada responsabilidad,
el trabajo impide el acceso a la escolarización,
el trabajo mina la dignidad y autoestima del niño (como el esclavismo y la explotación sexual),
impide conseguir un pleno desarrollo social y psicológico.
La Convención sobre los Derechos de la Infancia, firmada en 1989 por todos los países excepto la Islas Cook, Somalia, Omán, Suiza, los Emiratos Árabes Unidos y EEUU, obliga a los gobiernos a proteger a los niños de "la explotación económica y de realizar ningún trabajo que pueda ser peligroso o interferir en la educación del niño, o que sea peligroso para la salud física, mental o espiritual del niño o para su desarrollo social."

Cerca de 50 países han ratificado la Convención 138 de la OIT sobre edades mínimas para trabajar, que establece normas más rigurosas que la convención anterior. Establece que 15 años es la edad mínima aceptable en países industrializados, y 14 años en los demás países. Permiten que los niños hagan trabajos suaves a los 13 años en países industrializados y a los 12 en países más pobres. Prohíbe el trabajo que pueda amenazar la salud, la seguridad o la moral para niños menores de 18 años.

La explotación infantil como consecuencia y a la vez causa de la pobreza, aunque la pobreza no es necesariamente generadora de trabajo infantil

Agotamiento para vivir y trabajar, analfabetismo, enfermedades y desnutrición, envejecimiento precoz, constituyen una espiral condenatoria para los chicos.

Es evidente que existe una relación entre el trabajo infantil y la pobreza, ya que los niños que trabajan son todos pobres. Pero la pobreza no es la causa del trabajo infantil; el hecho de que la proporción de trabajo infantil varíe dramáticamente entre países de niveles similares de desarrollo económico, es clara muestra de esto. Como ejemplo podemos analizar el estado Kerala, en la India, que  ha  abolido el trabajo infantil, y  ha impulsado una deslegitimación del mismo  a través  de campañas en los medios y en las organizaciones intermedias y ha decidido enviar a todos los chicos compulsivamente a la escuela, para lo cual ha destinado las partidas de presupuesto necesarias. De este ejemplo podemos inferir que el trabajo infantil sólo puede existir si es tratado como aceptable cultural y políticamente.

Según la Fundación Internacional por los Derechos Laborales, en muchos países hay una fuerte tradición de tolerar el trabajo infantil, que se combinan a menudo con prejuicios hacia poblaciones aisladas. El resultado es la expansión de trabajo infantil entre algunos grupos étnicos pobres. De forma similar, actitudes discriminatorias hacia mujeres y chicas pueden reforzar la voluntad o la tolerancia de los padres de que sus hijas vayan a prostituirse o a servir en casas no como empleadas sino como cuasi esclavas.

Donde la educación es obligatoria, prioritaria, gratuita, de cumplimiento efectivo y entendida como importante, la proporción de trabajo infantil baja.

Los factores de pobreza, tradiciones culturales, prejuicios hacia grupos étnicos, religiosos o raciales, discriminación de las chicas, acceso inadecuado a la educación y búsqueda de mano de obra dócil por parte de los empresarios, han existido desde hace siglos. Lo nuevo es la globalización económica. Este factor contribuye a incrementar el trabajo infantil debido a la competencia en el mercado global, que hace que todo el mundo busque bajar los costos de producción compitiendo no ya en el pueblo ciudad provincia o país sino en la alea global y con transparencia de precios lo que empuja los mismos como nunca hacia abajo.

Al trabajo infantil lo podemos clasificar básicamente en dos tipos:

a) Aquellos que dentro de las familias campesinas o artesanas trabajan para ellas mismas y por la situación de pobreza, la falta de infraestructura o la ausencia de garantías sociales necesitan de los brazos infantiles. El niño puede trabajar algunas horas al día e ir a la escuela o en otros casos puede que trabaje todo el tiempo, pero no se puede hablar de explotación sino sólo de miseria.

b) Aquellos en que son empleados por un patrón externo

¿En que trabajan los chicos?

La mayoría de los niños que trabajan a tiempo completo lo hacen en el sector agrícola comercial, pero hay niños trabajando en multitud de sectores: servicio doméstico, , minería, pesca de gran profundidad (buceadores), construcción, material deportivo, calzado deportivo, equipamiento quirúrgico, cerillas y pirotecnia, carbón vegetal, fábricas de cristal y cerámica.

Minas de carbón en Colombia
Los pasillos de las minas son bajos y angostos, así que los propietarios (habitualmente los padres de los trabajadores) entienden que los niños, resultan ideales para este trabajo por una cuestión de tamaño. Encorvados y con dificultades para respirar, los niños cargan pesadas bolsas de carbón en sus espaldas. Están expuestos a altos niveles de polvo, con riesgo de lesiones y enfermedades pulmonares. Se estima que son miles de chicos los que desarrollan este trabajo.

Pelotas de fútbol

Buena parte del material deportivo del mundo se produce con trabajo infantil. En Pakistán, el mayor exportador de pelotas de fútbol (provee más del 60% del mercado estadounidense), por ejemplo, hay más de 7.000 chicos menores de catorce años que cosen pelotas, cobrando 0,60 dólares por pelota; incluso los niños más mayores no pueden coser más de 3 o 4 pelotas en un día.

El turismo pedófilo

Cada día aumenta el número de niños y niñas prostituidos en todo el mundo, En los últimos años, los casos pedofilia, abusos, prostitución y de pornografía infantil han aparecido constantemente en los medios de comunicación. ¿Es que antes no existía esta explotación? Siempre se ha abusado de la infancia, pero probablemente nunca se había llegado a un nivel de marketing tan feroz y global como el de ahora producto de Internet, baja en los costos, información etc.

En el sureste de Asia, la urbanización y el empobrecimiento de las economías rurales, son factores importantes que empujan a las familias a vender a sus hijas a la prostitución.  El incremento en prostitución infantil está ligado al crecimiento del turismo sexual, producto de la globalización, el abaratamiento de los pasajes Internet etc.

Más de un millón de niños y niñas son esclavos sexuales en Camboya, India, Filipinas, Tailandia, Taiwán y otros países. El desarrollo económico del sudeste asiático no ha ayudado a reducir este problema, continua habiendo miseria y cuando no es la propia gente del país la que compra o secuestras a los niños/as para la prostitución, son los propios niños los que, para sobrevivir, se ofrecen en la calle.

El principal flujo de turistas ávidos de sexo infantil proviene de países económicamente desarrollados (Europa occidental, América del norte, Australia, Nueva Zelanda, Japón y estados del Golfo Pérsico) y se extiende por los países más pobres del sudeste Asiático, África, América Latina y el Caribe. Algunos países de Europa del Este ex comunistas, están empezando a atraer turistas sexuales y a exportar niños/as prostituidos/as hacia las zonas vecinas.

Ya sea por medio de agencias de turismo que abiertamente venden paquetes de turismo sexual con oferta de menores incluida, el usuario de la prostitución infantil busca la impunidad que le ofrece el ejercicio de esta actividad en el tercer mundo. Vía Internet también, los explotadores sexuales han encontrado un potente medio de comunicación para intercambiar pornografía infantil o para informarse sobre nuevos "destinos turísticos".

Té y Bananas

¿Cuantos chicos y chicas mueren cada año manipulando pesticidas en las plantaciones? Es raro que la noticia de la muerte de chico/as intoxicados en las plantaciones de bananas de Centroamérica, por ejemplo, llegue a los medios.

En Bangladesh, Nepal y la India son la plantaciones de té, las que más incorporan trabajo infantil. En Assan el 70% de la mano de obra es infantil, horarios larguísimos y paupérrimas pagas. Esta situación genera altísimos beneficiosa a las multinacionales del té, ya que operan con costos bajísimos.

 

Industria de ladrillos en Camboya

Los niños usualmente trabajan con las manos desprotegidas, y a veces descalzos. A menudo se cortan y se les caen ladrillos a las manos y a los pies. Algunos trabajan con maquinaria pesada y muchos se cortan las manos o los dedos con las máquinas. Más de la mitad de los niños entrevistados por el Asian-American Free Labor Institute dijeron estar en deuda con su amo. La mayor queja era el cansancio.

Vestidos, seda y zapatos para lejanos consumidores.

Son los productos de baja tecnología y gran consumo aquellos que producen para la exportación países como Tailandia, China o Indonesia, los que hacen crecer su desarrollo industrial. En el medio están las multinacionales que contratan el trabajo a empresa locales, quienes lo subcontratan a otras más pequeñas. En este círculo se insertan el trabajo de los niños/as. En Indonesia el trabajo infantil está permitido, pero sólo por cuatro horas al día, los niños/as en la industria manufacturera son más de trescientos mil. Durante el año 1991 se inicio la denuncia del uso de trabajo infantil en la fabricación de las zapatillas NIKE, Otra marca famosa, ADIDAS, ha transferido toda su producción a Asia, cerrando todas las fabricas en Europa.

En Brasil

El esfuerzo físico requerido para cortar, cosechar y cavar en granjas o plantaciones pobremente mecanizadas puede ser enorme. En las plantaciones de azúcar del Brasil, por ejemplo, los chicos cortan cañas con machetes, una tarea que los pone constantemente en riesgo de quedar discapacitados. Constituyen un tercio de la mano de obra y se ven involucrados en un 40% de los accidentes laborales.

Durante los años 80 hubo grandes cambios en el sector agrícola del Brasil. Grandes plantaciones se mecanizaron más y más y se incrementó su grado de dedicación a la exportación, y la tierra se concentró cada vez más en pocas manos de grandes empresas agrícolas. Los trabajadores de las plantaciones y los pequeños agricultores expulsados de sus tierras se juntaron con los grupos de trabajadores temporales que se conocieron como "bóias frias" o "volantes". Dado que los ingresos de muchas familias disminuyeron considerablemente, estas fueron empleando a los hijos. Hoy, una buena proporción de los niños que trabajan en Brasil son bóias frias.

En la Argentina

En la Argentina la explotación del trabajo infantil ha crecido junto a la pobreza, a la precarización y a la falta de empleo de los adultos. Según datos de UNICEF, entre 1995 y 2002 la brecha de ingresos entre ricos y pobres se duplicó y entre 2001 y 2003 se han empobrecido 1,5 millones de niños más, a razón de 1.570 niños por día. Así, de los 252 mil niños de 5 a 14 años registrados que trabajaban en 1995 se pasó en el 2000 a casi el doble, 490 mil, o sea, el 91,5 por ciento más.

La mano de obra de los niños es utilizada también para cosechar yerba mate en Misiones, tabaco en Salta, algodón en Chaco, cebolla en San Juan, peras y manzanas en Río Negro, limones en Tucumán y diversas frutas y verduras en las quintas bonaerenses.

En el 2004, por ejemplo, se llegó a pagar en Mendoza entre 36 y 85 centavos el tacho de uva (de 21 kilos). Pero también hay bandas organizadas que “alquilan” niños por menor paga que un adulto, como en la “tarefa” (cosecha) de la yerba mate mesopotámica, donde la Unión de Trabajadores rurales y Estibadores ( UATRE) estiman que entre 6 mil y 7 mil niños dejan la escuela durante la temporada de cosecha.

Sirvientes de las familias ricas

Se considera trabajo infantil doméstico a las tareas domésticas desempeñadas por niñas y niños que no han cumplido la edad mínima legal de admisión al empleo, en un hogar que no es el suyo y en condiciones que atentan contra su dignidad y desarrollo. La explotación es económica cuando la niña o niño debe trabajar durante horarios prolongados sin disponer de tiempo libre y recibe un salario bajo o ninguna remuneración. A los trabajadores infantiles domésticos se los explota porque normalmente carecen de protección social y jurídica y se los somete a duras condiciones de trabajo y a realizar tareas peligrosas como la manipulación de sustancias tóxicas. “Invariablemente -subraya el estudio- se les niegan los derechos que, como niñas y niños, les concede el derecho internacional, a estudiar, jugar, a la salud y a estar a salvo del abuso y el acoso sexual, a visitar a su familia o ser visitados por ella, a reunirse con amigos, a un alojamiento digno y a la protección contra el maltrato físico y mental.”

No los ve nadie pero son millones los pequeños sirvientes de más de seis años, a menudo reciben como pago sólo la comida -escasa y diferente a la de los amos- y se los maltrata. Muchas veces se los lleva al exterior. Esta situación ha sido denunciada por la asociación Anti-slavery International, quien ha dado datos de familiares de diplomáticos implicados con residencia en Francia y Suiza.

En la argentina más pobre las niñas de once años ya se emplean en casas de familias ricas y no tanto en las provincias del noreste por ejemplo, donde son muchas veces víctimas de abuso abierto , o en otros casos se “enamoran” de los hijos adolescentes de la familia. Aquí tenemos desde abusos violaciones, madres niñas, abortos mal practicados hasta los casos más graves de pedofilia.

Las prohibiciones sin control no funcionan, ni tampoco sin concientización y deslegitimación de este tipo de trabajo, a través de los medios y canales que dispone el gobierno, para operar en este sentido.

Entre la Basura y El tráfico

Cartoneros, limpiavidrios, despreciados por muchos, obligados a sufrir abusos de chicos mayores, pasan la mayor parte del día en la calle, expuestos a violencia abusos e iniciación en consumo de substancias como el “paco” de un peligro superior a las drogas tradicionales.

En el subte en Buenos Aires

Se los puede ver pidiendo las monedas que sobran, a los que compran los boletos, perfectamente organizados, otros piden “me regala el diario” refiriéndose al diario “la Razón” que se entrega en forma gratuita a los pasajeros de las diferentes líneas de subterráneo.

Otros reparten unas estampitas, previamente saludando y dando un beso a cada uno de los pasajeros, estrategia de marketing obviamente desarrollada por los que organizan a estos menores.

El gobierno de la ciudad de Buenos Aires nada hace, convirtiéndose en cómplice de esta situación. Los menores son claramente dirigidos por mayores que organizan y comandan a estos esclavos, manejando esta organización con celulares y supervisores de catorce y quince años, todo de manera abierta. Si solo existiera, voluntad se podría terminar con este flagelo.

Macroeconomía e imposiciones

A nivel macroeconómico, las imposiciones por parte del Banco Mundial y el FMI, han contribuido al desarrollo del trabajo infantil.

Se impone a los gobiernos que promocionen las exportaciones y recorten el gasto público como condición para seguir recibiendo préstamos. En muchos casos los recortes son en educación investigación salud vivienda etc.

Es preciso señalar que en los últimos años, el Banco Mundial ha reconocido la importancia de la educación y la salud, como variables excluyentes para el desarrollo y ha instado a los gobiernos a mantener programas en estas áreas, así como inversiones en capital humano.

Sin embargo el Banco mundial comente un error increíble cuando pone el acento en promocionar la escuela secundaria terciaria y la universidad, cuando el multiplicador mayor del trabajo infantil se encuentra en la carencia de sostenimiento de los estudios primarios.

La Organización Internacional del Trabajo calculó que reemplazar el trabajo de todos los niños en actividad en el mundo por una educación universal representaría una inversión de 760 mil millones de dólares hasta el año 2020, que a su vez podría generar beneficios por 5,1 billones de dólares, una cifra casi siete veces mayor que los costos totales estimados para lograr el objetivo.

Caminaba por Rivadavia pensando en donde encontraré al Puma Rodríguez, Gonzalo dentro de diez años… depende.

Offnews.info (Argentina)

 


Otras Notas Relacionadas... ( Records 1 to 10 of 5721 )
fecha titulo
11/11/2022 The Ultimate Unmasking of Henry Kissinger: Ambassador Robert C. Hilland the Rewriting of History on U.S. involvement in Vietnam and Argentina’s “Dirty Warâ€
10/11/2022 Un infierno astral se cierne sobre el Gobierno
24/04/2020 Argentina- Informe de Coyuntura semanal (versión corta) al 21 de abril sobre la situación política y económica argentina
20/04/2020 Argentina- Inflación y emisión: ¿qué pasará después de la cuarentena?
14/04/2020 Coronavirus en la Argentina. Alberto Fernández lleva al kirchnerismo a su lado más oscuro
09/04/2020 Argentina - Coronavirus: ¿No hay Estado presente para salvar a la economía?
06/04/2020 Argentina - ¿Una guerra de todos?
06/04/2020 El nuevo mundo de los corona-zombies
25/03/2020 Agentina - Informe de Coyuntura semanal (versión corta) al 24 de marzo sobre la situación política y económica argentina
22/09/2018 Sin dudas, la Argentina necesita volver a tener moneda


Otras Notas del Autor
fecha
Título
25/01/2008|
12/07/2007|
16/06/2007|
16/06/2007|
03/05/2007|
03/05/2007|
22/02/2007|
22/02/2007|
22/02/2007|
18/07/2006|
12/06/2006|
31/05/2006|
12/10/2005|
23/08/2005|
10/07/2005|
21/06/2005|
16/05/2005|
14/05/2005|
06/05/2005|
03/05/2005|
28/04/2005|
14/03/2005|
14/03/2005|
26/02/2005|
26/02/2005|
12/02/2005|
12/02/2005|
02/02/2005|
02/02/2005|
02/02/2005|
13/01/2005|
13/01/2005|
06/01/2005|
06/01/2005|
03/01/2005|
03/01/2005|
17/12/2004|
17/12/2004|
16/11/2004|
16/11/2004|

ver + notas
 
Center for the Study of the Presidency
Freedom House